El uso de los servicios de la nube se ha vuelto, prácticamente, generalizado para las organizaciones en todo el planeta.
¿Qué es y en qué consiste los servicios de la nube?
Puede definirse como: Una red mundial de servidores, cada uno con una función única. La nube no es una entidad física, sino una red enorme de servidores remotos de todo el mundo que están conectados para funcionar como un único ecosistema. Estos servidores están diseñados para almacenar y administrar datos, ejecutar aplicaciones o entregar contenido o servicios, como streaming de vídeos, correo web, software de ofimática o medios sociales. En lugar de acceder a archivos y datos desde un equipo personal o local, accedes a ellos online desde cualquier dispositivo conectado a Internet, es decir, la información está disponible dondequiera que vayas y siempre que la necesites (Azure Microsoft).
Esta solución presenta múltiples beneficios, como por ejemplo:
a) Flexibilidad
Los usuarios pueden escalar los servicios para adaptarse a sus requerimientos, personalizar las aplicaciones y acceder a los servicios en la nube desde cualquier ubicación con una conexión a Internet.
b) Eficiencia
Los usuarios de empresas pueden lograr que las aplicaciones se comercien rápidamente, sin preocuparse por los costos de infraestructura o mantenimiento latentes.
c) Valor estratégico
Los servicios de nube dan a los negocios una ventaja competitiva, al otorgarles la tecnología disponible más innovadora.
Sin embargo, a pesar de las evidentes ventajas que presenta, aún existen algunos mitos con respecto a su función. Por ello, hemos elegido algunos de los más comunes y la explicación para cada uno.
Los mitos acerca de la nube
1. La nube siempre tiene que ver con el dinero.
El mito que prevalece sobre la nube, es que invariablemente, ahorra dinero. En ocasiones es así; sin embargo, hay muchas otras razones para migrar a la nube. La más común es la agilidad.
Todas las decisiones empresariales, incluidas las relativas a la nube, en última instancia, están relacionadas con el dinero.
Aunque el objetivo final sea la agilidad, el costo sigue siendo una preocupación.
No dé por sentado que va a ahorrar dinero, a menos que haya hecho un trabajo exhaustivo para analizar su situación.
Utilice el costo total de propiedad y otros modelos, en función de cada requerimiento. Segmente la nube en casos de uso. Mire más allá de las cuestiones de costo. Es importante asegurarse de que la empresa no tenga expectativas irreales de ahorro de costos que no se cumplan.
2. La nube limita el control
Al contrario, se gana más control, más visibilidad, así como la concreción de procesos y estándares de industria en general, cuando un tercero está haciendo la inversión en centros de datos, redes, mantenimiento, entrenamiento y experiencia. Así, en lugar de enfocar el esfuerzo en temas básicos de cuidado de la infraestructura, los equipos pueden centrarse en temas como la seguridad, la optimización y planeación.
3. Se necesita una sola estrategia de nube o solo un proveedor
Hoy en día, muchas empresas buscan la simplicidad. Sin embargo, hay que considerar que la computación en la nube no es una sola cosa, y una estrategia así, tiene que partir de esta realidad. Estos servicios son amplios y abarcan diversos niveles, modelos, alcances y aplicaciones.
Una estrategia de nube debe ser capaz de alojar el uso de más y más servicios en ella. La empresa debe tomar en cuenta que será, relativamente imposible, obtener todo de un solo proveedor. Una estrategia de nube única solo tiene sentido, si utiliza una estructura de decisión que permita y espere múltiples respuestas.
4. El ambiente de ciertas empresas es muy complejo para la nube
No es relevante cuál sea el nivel de complejidad de la infraestructura que se tenga. Al adoptar la nube, las organizaciones (independientemente de su área o tamaño), instantáneamente, aumentan su capacidad para escalar su infraestructura o para simplificar su operación. Esto, con el fin de cumplir con las necesidades de su red de cómputo, lo que optimiza la agilidad e innovación y abre la puerta a la automatización.
5. Las compañías en industrias reguladas, no pueden estar en la nube
Hay ejemplos en industrias como cuidado de la salud, finanzas, educación, agencias de gobierno o comercio al detalle, entre otros, donde la nube da respuesta sus necesidades particulares. Un ejemplo evidente de ello, es la incorporación de herramientas empresariales basadas en nube como procesadores de texto, compartición de documentos y colaboración remota por parte de organizaciones públicas y privadas, optimizando su agilidad y gestión.
6. Una vez que se haya migrado a la nube, ya no hay que hacer nada más
Hay muchos caminos para llegar a la nube, que pueden ir desde el simple realojamiento (o lift and shift [migrar copia]); frecuentemente, a través de la infraestructura como servicio, hasta el cambio completo a una aplicación implementada por un proveedor de software como servicio (Software as a Service, SaaS).
La nube es, tanto un modelo operativo, como una tecnología. Las empresas que tienen éxito con ella, adaptan su proceso operativo para aprovechar plenamente los principios de la nube.
Para disfrutar de todas sus capacidades, es esencial entender el modelo y tener expectativas realistas. No se puede migrar todo a la nube y pensar que ya no queda nada más por hacer.
Una vez que se ha pasado la carga de trabajo a la nube, en diferentes aspectos, el trayecto a penas comienza.
Será necesaria una reelaboración o reescritura adicional, para beneficiarse de las ventajas de la nube. La gestión continua de los costos y del desempeño, también serán clave para el éxito. Asegúrese de incluir las actividades post-migración como parte del plan de implementación de esta solución.
7. Si no se puede ver el centro de datos, no es confiable, ni resiliente
Emplear esta solución, no implica que todo esté fuera de sitio. El usuario decidirá qué datos y actividades permanecen en una nube privada dentro del centro de datos propio.
Ya sea que se elija una nube pública, privada o híbrida (o no), la infraestructura distribuida y la inversión realizada por los proveedores de esta solución, desarrolla la resiliencia del negocio debido a la elasticidad de la infraestructura en la nube pública, donde es muy fácil agregar servidores virtuales cuando se necesite y pagar únicamente por lo que se utiliza. Adicionalmente, el cumplimiento de niveles de servicio previamente definidos (hasta 99,99%), representa una gran ventaja.
Las consolas de gestión ofrecen visibilidad a lo largo de la red y los dispositivos, brindando alertas tempranas en cualquier área crítica de operación, asegurando así, la confiabilidad y el desempeño de los recursos administrados en la nube.
8. La nube no es lo suficientemente flexible para las necesidades organizacionales
La mayor ventaja de la nube es la flexibilidad. Se pueden aumentar o disminuir las capacidades, conforme el crecimiento de la compañía lo demande. Es flexible en cuanto al costo operativo y de inversión, puesto que en lugar de tener servidores que consumen recursos como energía eléctrica y enfriamiento, se activan únicamente cuando se necesitan. También lo es, con respecto a la ubicación geográfica en donde se requiere desplegar, incrementando la cobertura de la compañía en cuestión de minutos.
Consejos para la migración a la nube
Deje de lado los mitos y tenga una óptima experiencia con la nube, tomando en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Implemente una plataforma que permita administrar toda la infraestructura de red distribuida en una única interfaz, como puntos de acceso, SD-WAN & firewall, switches de acceso, equipo IoT (sensores, cámaras de seguridad) y dispositivos móviles, tabletas, laptops y smartphones. Esto le permitirá simplificar la administración de la red, disminuyendo significativamente los costos operativos.
- Verifique que la interfaz para gestionar y administrar la infraestructura de red en la nube consista en una 100% web interactiva que faculte el monitoreo proactivo de la red de acceso, WAN e IoT, otorgando la posibilidad de resolver problemas de forma remota, en cualquier momento y desde cualquier lugar.
- La plataforma debe ser escalable de forma rápida y segura desde el día cero, permitiendo que el área de TI actúe en tiempo récord con resultados, para alcanzar un retorno sobre la inversión notable.
- La plataforma debe estar preparada para habilitar ambientes híbridos de trabajo sin perder la supervisión y monitoreo de las tecnologías de acceso, WAN e IoT sin cambiar de contexto.
- Corrobore que la solución cuente con: 99,99% de confiabilidad (SLA), arquitectura redundante de alta disponibilidad, centro de datos certificados ISO 27001 (fuera de EE.UU.) y centro de datos auditados SSAE18 Tipo II (EE.UU.)
- El uso de la nube habilita a las compañías con herramientas tales como: conectividad en todo momento y desde cualquier ubicación a su infraestructura; adaptabilidad a los requerimientos cambiantes del negocio, disminución de costos, reducción de complejidad operativa y automatización de procesos.
Un ejemplo muy evidente para las organizaciones es aprovechar los beneficios de la nube para administrar su infraestructura de red. Mediante el uso de una plataforma confiable, los negocios pueden tener una visión centralizada de su operación, aplicar cambios de manera simplificada y generalizada, estandarizar configuraciones y políticas de seguridad, complementadas con analítica que les permitan tomar decisiones de negocio precisas y con visión de futuro.
Fuentes de Consulta:
¿Qué es la nube? (s.f.) ¿Qué es la nube? Azure Microsoft. Recuperado de: https://azure.microsoft.com/es-es/resources/cloud-computing-dictionary/what-is-the-cloud
Sauerwalt, R. (s.f.) Beneficios de la computación en la nube. IBM. Recuperado de: https://www.ibm.com/mx-es/cloud/learn/benefits-of-cloud-computing
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Rimol, M. (Enero 10, 2020). Los 10 principales mitos sobre la nube. Gartner. Recuperado de: https://www.gartner.mx/es/articulos/los-10-principales-mitos-sobre-la-nube
