La violación de datos y exposición de datos personales es un problema mucho más común de lo que se cree, y que pueden afectar desde un individuo hasta una gran empresa. Es posible que una persona sea víctima del robo de información personal, como la de sus cuentas bancarias, para tener acceso a los recursos que tiene en estas instituciones.
A un nivel mucho más amplio, muchas empresas a nivel global han sido víctimas del robo de información estratégica, datos, acceso a cuentas, recursos, fraude, suplantación, filtración total de datos, entre otros ataques cibernéticos que afectan su trabajo, intereses y recursos.
La mejor forma de evitar este tipo de ataques cibernéticos y que diferentes tipos de datos personales sean expuestos es tomando medidas de ciberseguridad que ayuden a detenerlos y mantener a salvo la información, recursos o activos de las personas u organizaciones. Y para estar listos ante esta posibilidad, es necesario saber qué tipo de ataque puede presentarse.
Estos son los 5 tipos de violación de datos más recurrentes:
Robo Físico:
Éste puede darse por la infiltración de personas mal intencionadas dentro de la empresa. Puede ser tan fácil como concertar una USB en un equipo donde se encuentra la información que buscan, extraer documentos confidenciales o deshacerse de información confidencial de forma incorrecta para que pueda ser extraída por otros.
Ciberataques:
Es una de las formas más comunes, ya que representa menos riesgo para quien busca extraer información al no tener que estar físicamente en un lugar. Con la colaboración de hackers, pueden intervenirse los servidores o equipos de una persona o empresa, incluso por años, y sin que nadie se dé cuenta.
Ataques internos:
Muchas veces, el enemigo está en casa y puede pasar desapercibido por mucho tiempo. IBM Insider Threat Detection reporta que las amenazas internas representan el 60% de los ciberataques, por lo cual es necesario estar pendientes de los colaboradores y los factores que podrían provocar un ataque interno.
Programas de secuestro de datos:
También conocidos como “ransomware”, estos programas permiten a los atacantes cubrir sus huellas, mientras secuestran información importante para lucrar con ella. La frecuencia con la que se presenta es alta, pues el FBI estima que hay más de 4 mil ataques de ransomware por día.
Error humano:
Cometer errores es sumamente común entre individuos, es parte de la naturaleza del ser humano, pero esto puede poner en riesgo datos confidenciales de la empresa o recursos valiosos para ella. El mal resguardo de contraseñas o enviar información importante por correo al destinatario incorrecto, son algunos ejemplos.
La violación y filtración de datos es un enorme reto para muchos expertos en ciberseguridad, pues cualquier individuo u organización, sin importar su tamaño, puede ser víctima de estas prácticas. Una vez que se roba la información de la víctima, pueden cometerse con ella distintos delitos o venderse en la deep web para los mismos fines.
Lo mejor es crear una cultura de seguridad y prevención dentro de la empresa, en la que se establezcan medidas tanto en el entorno físico como en el digital. De esta forma, se podrán evitar, detectar y controlar los ataques para evitar que la empresa sea víctima de personas mal intencionadas.
Fuentes:
https://es.statefarm.com/simple-insights/residencia/como-protegerte-de-la-filtracion-de-datos