En el pasado se llegó a considerar a la diversidad como una barrera para el crecimiento empresarial. Afortunadamente, en la actualidad esa idea ha cambiado y se ha potenciado significativamente.
Y para muestra, algunas estadísticas (HubSpot, 2021):
- Un 50% de los empleados actuales desean que su lugar de trabajo realice más acciones para aumentar la diversidad laboral (Glassdoor).
- En cuanto a las minorías en búsqueda de trabajo, 72% de las mujeres, 89% de los afroamericanos, 80% de los asiáticos y 70% de los latinos clasifican la diversidad laboral como el aspecto más importante (Glassdoor)
- La consultora Hays reveló que el 45% de los empleadores afirma tener programas y políticas de Diversidad e Inclusión, y un 47% posee programas enfocados en la población con discapacidad (Vanguardia)
- Las organizaciones con un equipo de liderazgo más diverso, de acuerdo con un estudio, tenían ingresos 25% más altos que las empresas con líderes menos diversos (McKinsey)
- En 2019, más de la mitad de los empleados a nivel mundial priorizaron una cultura laboral sólida sobre el salario, al momento de decidirse por un puesto de trabajo (Glassdoor)
- Una investigación de Mckinsey sugiere que cuando las empresas invierten en diversidad e inclusión están en una mejor posición para crear equipos más adaptables y efectivos; además, es más probable que reconozcan la diversidad como ventaja competitiva (McKinsey)
- Un lugar de trabajo diverso propicia la variedad de talento, experiencias y perspectivas (IOE)
- Las empresas u organizaciones carentes de diversidad pueden ser llamadas a justificarse públicamente o, incluso, llegar a perder ventas o su reputación (IOE)
- Los equipos inclusivos toman mejores decisiones hasta en un 87% del tiempo (Trello)
- Aquellas compañías con mayor diversidad racial y étnica tienen 35% más probabilidades de tener rendimientos financieros por encima de otras empresas de la misma industria (Trello)
Sin embargo, así como el contar con un equipo diverso conlleva grandes ventajas, también implica enormes retos, sobre todo, al momento de establecer códigos de comunicación eficientes.
Por ello, le proporcionamos algunas pautas que puede implementar en su negocio o institución y lograr mejores resultados al respecto:
1. Escucha activa
El primer paso de una comunicación eficiente, es el escuchar atentamente. Esto ayuda a establecer conexión entre los colegas en el trabajo, optimiza el bienestar de los empleados y consolida las relaciones entre el personal.
Cuando se establece una escucha activa se pueden comprender de mejor forma, las dinámicas grupales e identificar la compatibilidad entre compañeros para crear equipos más productivos.
Adicionalmente, faculta el anticipar y resolver potenciales conflictos antes de que se conviertan en algo más complejo.
Asimismo, esta habilidad debe ser desarrollada por cada uno de los miembros de la organización, por lo que es importante generar programas de capacitación que les permitan lograrlo.
2. Conciencia cultural
Una forma de propiciar un clima empático, armónico y respetuoso, es generar una mayor conciencia cultural. Con ello, es posible ver más allá de las acciones y los comportamientos del personal que proviene de otros países o etnias, y así, comprender cómo las creencias, los valores y las tradiciones de cada individuo, afectan su forma de comunicarse.
También, ayuda a honrar las diferencias, por ejemplo, celebrando las fiestas locales de otros sitios o invitando a todos los miembros a compartir sus costumbres en eventos organizados por la empresa o institución.
3. Elija adecuadamente sus palabras
Es un hecho que hay ciertas palabras que, en un contexto particular, pueden ser perfectamente aceptadas, mientras que en otros, llegan a ser incómodas o hasta ofensivas.
Por ello, es necesario identificar dichos términos, indagando o preguntando directamente cuáles pueden tener una carga negativa. Una vez que se realice este sondeo, es imperativo concienciar al personal con respecto a su uso.
Entender el contexto del lenguaje es clave para una competencia comunicativa intercultural efectiva.
4. Instrucciones claras
La retroalimentación siempre es de gran utilidad para los miembros del equipo, ya que les ayuda a saber cuáles son sus áreas de oportunidad, cómo pueden mejorar y en conjunto, cómo se pueden disminuir los márgenes de error.
Si en un grupo homogéneo esto es de gran ayuda, en uno intercultural es determinante para empoderar a los individuos a generar un ambiente laboral favorable y ser mucho más eficientes. Otro aspecto a considerar es que, en los equipos diversos, los malentendidos pueden darse a consecuencia de que, en cada lugar, se emplean recursos paralingüísticos distintos como tonos, ritmos, pausas y volúmenes al hablar.
Por tanto, hay que animar a los colaboradores a preguntar de forma libre, cuando les surja alguna duda o inquietud.
Para ello, se les puede enseñar algunas frases asertivas, para asegurarse de que han entendido lo que su interlocutor les ha dicho y así evitar confusiones o malos entendidos.
5. Cultura respetuosa
El respeto a las diferencias culturales es esencial para fomentar la competencia comunicativa intercultural en el trabajo. Lográndolo, habrá menos enfrentamientos que puedan dañar las relaciones laborales.
La falta de sensibilidad cultural no es de gran ayuda a la hora de mantener un ambiente de trabajo sano y positivo. Los líderes deben encauzar el comportamiento de sus empleados y dar ejemplo. No se les puede pedir que no bromeen sobre las costumbres religiosas o étnicas de un compañero, o que no hagan comentarios racistas o sexistas, si quien está por encima jerárquicamente, lo hace.
Para potenciar interacciones interculturales sanas, deben establecerse pautas de respeto mutuo entre los miembros del equipo.
6. Políticas interculturales
Las políticas de una empresa son las que aseguran que haya coherencia en el comportamiento que se espera del equipo, así como que éste conozca las consecuencias de no tenerlo. Por tanto, cuando se implementan políticas que apoyan una comunicación apropiada entre trabajadores de culturas distintas, se refuerza la competencia comunicativa intercultural.
Al momento de trazar las directrices de la política intercultural de la compañía, es conveniente hablar con trabajadores de distintos grupos culturales y preguntarles con qué prejuicios suelen toparse, qué normas culturales les resultan difíciles de entender o les incomodan y qué comportamiento encuentran respetuoso y adecuado en el lugar de trabajo. Con esta información, se pueden crear políticas relevantes y adaptadas a su organización.
También, se deben establecer las sanciones, en caso de no respetarlas} Establecer políticas interculturales hará que tu equipo respete ciertas normas de etiqueta cultural cuando interactúen con compañeros, socios y clientes de otros orígenes.
7. Viajes de inmersión cultural
Viajar es una forma más inmersiva de desarrollar las competencias comunicativas interculturales de los miembros de los equipos de trabajo.
Cuando se visitan sitios muy distintos a los del país de origen, tienen la oportunidad de conocer de primera mano las costumbres y tradiciones de otras culturas. Lo cual, no solo amplía sus horizontes, sino que les permite ganar práctica a la hora de desenvolverse en un contexto intercultural.
Si se labora en una compañía global, se puede contactar a los equipos de otros países para pedirles consejo sobre dónde hospedarse, qué actividades realizar, qué lugares visitar, etcétera.
Vivir experiencias directas ampliará los conocimientos culturales de la plantilla y su conciencia tanto de otras culturas como de la suya. En consecuencia, su competencia comunicativa mejorará.
8. Formación lingüística
La formación en idiomas es un medio muy efectivo, a través de que se perfecciona la competencia comunicativa intercultural.
Cuando se aprende otra lengua, se facilita el entender el estilo de vida, las costumbres y los valores de sus hablantes, ya sea por medio de sus particularidades, su jerga o sus expresiones. Según el antropólogo Alfred Louis Krober, toda cultura empieza por el habla, y cuando se enriquece el conocimiento sobre una, simultáneamente se enriquece sobre la otra.
Hay que identificar qué personas de la compañía están en puestos que requieren formación lingüística, como los líderes de equipos globales o los trabajadores de atención al cliente, que, a menudo, interactúan con empleados y clientes extranjeros.
Además, el idioma (un componente esencial de las conexiones humanas) es un aspecto determinante dentro de la competencia comunicativa intercultural. Es esencial para entender los pensamientos y sentimientos de los empleados y clientes de otras culturas y, por otro lado, ayuda a prevenir malentendidos y conflictos innecesarios en el trabajo.
Si usted es gestor de Capital Humano en una organización con representación internacional, sabrá que desarrollar la competencia comunicativa entre los miembros de los diversos equipos, es prioridad para alcanzar los objetivos de la empresa o institución en la que se desempeña.
Esperamos que estas 8 pautas estén ya funcionando en su compañía o, al menos, estén en vía de ponerlas en práctica. Si aún no comienza, no lo postergue más.
Fuentes de Consulta:
Pursell, S. (s.f.) 34 estadísticas sobre diversidad laboral que todos deberíamos conocer. HubSpot. Recuperado de: https://blog.hubspot.es/service/estadisticas-diversidad-empresas#:~:text=Mejoras%20en%20la%20diversidad%20laboral&text=El%2060%20%25%20de%20las%20empresas,orientaci%C3%B3n%20sexual%20(El%20Economista).
Chilton, G. (Diciembre 23, 2022). 8 Tendencias sobre formación empresarial en 2023 que no te puedes perder. Preply Business. Recuperado de: https://preply.com/es/blog/b2b-tendencias-sobre-formacion-empresarial-2022/