Cuando la transición hacia el uso de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA) afecta a las personas de la organización o empresa, es momento de recordar que entre las plantillas de trabajadores existe una gran cantidad de talento que no se debe desperdiciar.
En este contexto, las empresas deben considerar la posibilidad de capacitar a los empleados en el uso de estas tecnologías. Capacitación que, sea dicho, debe ser constante.
Pero también es una realidad que para algunos trabajadores la llegada de la Inteligencia Artificial (AI) causa efectos negativos, dados los cambios radicales que conlleva. Por esta misma razón, los encargados de establecer dichos procesos, no deben perder de vista el impacto humano.
Si el trabajo de un colaborador se transforma significativamente debido a la tecnología, desde un inicio la empresa debe involucrar al empleado al principio del proceso de definición de nuevos flujos de trabajo.
Con la Inteligencia Artificial y la robótica comenzando a asumir muchas de las tareas repetitivas y que consumen mucho tiempo que los empleados han realizado en el pasado, y con la industria de la tecnología diciendo que estos dispositivos y procesos automatizados dejarán a los empleados con un tiempo valioso que pueden dedicar a tareas más complejas, los procesos laborales se han ido modificando.
Por ello, es importante seguir adelante con la fuerza laboral para asegurarse de que lo que dicen las empresas de tecnología sea realmente el caso y que se aborden los problemas de sus empleados, no para complicarles la vida, sino para mejorar sus actividades.
Algunas compañías líderes recurren al diseño de la experiencia del usuario para repensar la experiencia de sus propios empleados, en un intento por atraer y retener de manera más efectiva al talento crítico y adoptar formas de trabajo más abiertas y fluidas. El objetivo es tener una mejor comprensión tecnológica de las motivaciones de los empleados.
Hoy en día, cerca de 14% de las empresas en México está utilizando actualmente soluciones de Inteligencia Artificial para mejorar sus ventas, atención al cliente y automatizar procesos, una cifra que podría aumentar si se logran superar algunas barreras como la falta de talento.
Estos datos, como resultado de una reciente encuesta de IBM encargada a Morning Consult que encontró que no sólo ese porcentaje de compañías en el país ya usa esta tecnología, también 40% aceleró su implementación como resultado de la pandemia de Covid-19 y más de 57% está explorando su adopción.
Al usar herramientas como un journey map, desarrollo personal e investigación de usuarios, estas empresas pueden transformar la forma en la que los empleados pasan su tiempo en la empresa a lo largo de cada uno de los procesos.
Sin duda, las organizaciones deben estar preparadas para moverse y evolucionar rápidamente, particularmente para asegurar que cada empleado tenga la oportunidad de participar en este nuevo entorno.
Si se integra a los trabajadores a la transformación digital de la empresa, la actitud de los mismos colaboradores será determinada e impulsada por ellos mismos, además de que tendrá un impacto directo sobre la manera en la que las empresas reclutan, involucran y capacitan a su personal.
Los empleados informados y capacitados sobre el impacto del ingreso de la tecnología a su trabajo, contribuirán a la mejora de los procesos que tienen a su cargo. Esto se logra identificando y comunicando con claridad los objetivos y las metas del sistema de gestión de la calidad en toda la organización.
Aquellos empleados que tienen una participación definitiva para el logro de esos objetivos deben entender con claridad cuál es su aporte, qué se requiere de ellos y las medidas de éxito que se utilizarán.
Fuentes:
https://www.cetys.mx/trends/innovacion/el-desarrollo-del-capital-humano-con-inteligencia-artificial/